Espacionáutica


Del Vuelo Aerostático, a la Espacionáutica
[Estampa de colección personal, conservada de un album de la infancia.
En este caso, el Globo de Hidrógeno de Charles y Robert, de 1783]

Nacimos, con el nacimiento mismo de la llamada "Era Espacial".  Cinco años atrás había concluido la II Guerra Mundial, y la cohetería pasaba de su ensayo en el lanzamiento de los cohetes-bombas "V2", a la llamada "carrera espacial" de los años cincuenta-sesenta.

El "Bip-Bip" del Sputinik-I orbitando la Tierra en 1957, se producía cuando nosotros entrábamos al mundo del uso de razón propia (y desde entonces ya éramos testigos ingenuos, al principio indiferentes y luego extrañados, del fenómeno OVNI en la diversidad de pequeñas "estrellas" deambulantes en el transparente y estrellado cielo nocturno de ese entonces), y aún nuestros juguetes eran los primeros modelos de esa cohetería con la que se iniciaba, aquello de lo que, impensadamente, desde ese momento formaríamos parte; eso que ahora denominamos: la Espacionáutica, término que fusiona en un concepto muy propio a nuestro pensamiento profesional como geógrafo, los conceptos de Cosmonáutica de los soviéticos, y de Astronáutica, de los norteamericanos.

Y, como espacionauta natural muy propio a mi tiempo, no podía dejar de interesarme en la aviación y su derivación en la cohetería; al final, el proceso necesario que habría de seguir toda civilización inteligente, no dotada de origen con capacidad natural para el vuelo.  El siguiente paso a la tecnología de la sustentabiidad aérea del avión, o de la propulsión a reacción del cohete, finalmente, también llegó en nuestro tiempo con el llamado "Drón" levitador.

Con el Drón de la navegación por levitación, hemos dicho, no sólo llegó a su fin la era clásico-romántica de la ovnilogía, sino que la humanidad se ha puesto al filo de una nueva era en la espacionáutica.

Como geógrafo, reproducimos profesionalmente en nuestra persona en este momento histórico, otros momentos históricos cruciales de la exploración del espacio.  Ya no tendremos ocasión de "echarnos a la Mar Océana" del éter cósmico, pero ello no nos hará menos y verdaderos espacionautas.

En este Blog, esta página y sus categorías, estarán dedicadas a todo ello, valorando así, la capacidad humana de estarse poyectando como el alien, como la otredad respecto de habitantes posibles de mundos distantes; ante los cuales, esa es nuestra filosofía, habremos de presentarnos en calidad de su alteridad, como un alterego inteligente, de principios éticos universales.